lunes, 30 de marzo de 2015

florece la tierra

esperando estoy en un doble silencio
el final es luz disparada 
los ojos son nubes que cubren el lodo
los sonidos prevalecen 
está el silencio y puede no estarlo
como aquel sol que se oculta
lo escucho y deseo no tener oídos
tampoco sueño
esta vez las palabras velan por
sonidos más fuertes
arrancando en lo florecido 
de las bases de madera
donde de una sola fatiga
solo de madera te abrigaras
y esquiarás la luz 
donde el futuro es el primer verso
es sobre un árbol de azotada vida
con raíces que crecen desde el magma
hay una cruz con la sombra de las aves
la caída de las hoja las únicas lagrimas
que desafían a lo oculto
bajan por una rama hacia la montaña
esperan al volcán, su abraso
no llega el aire, se sigue desperdiciando leve
y su unión es posible con el torrente de
la piel naciente la tinta derritiendo
la puerta de entrada
por el siguiente silencio
 Audrey Kawasaki